En bolsa, saber cuándo hay que vender o comprar es vital para obtener ganancias. De hecho, podría decirse que se trata de quid de la cuestión. Sin embargo, dado el amplio espectro de opciones de trading que se abre ante nosotros en la actualidad, es necesario tener en cuenta las particularidades de cada mercado antes de cerrar o abrir operaciones. En este post te hablaremos, específicamente, de los mejores escenarios para vender tus acciones de empresas.

Los mejores momentos para vender tus acciones

Ganar dinero es el objetivo final de la inversión en acciones. Pero, para ganar grandes sumas, debes saber cuándo es el mejor momento para vender tus acciones. Puedes maximizar tus ganancias ejecutando estas decisiones en la madurez máxima. Sin embargo, esto es algo más fácil de decir que de hacer. Forma parte de la naturaleza humana querer resistir y esperar un momento aún mejor para vender las acciones, pero es posible que la oportunidad de obtener beneficios nunca vuelva a llegar.

Entonces, ¿cuándo es el momento más oportuno?

Cuando alcanzas tu precio objetivo

Siempre abandona mientras estés por delante. Los inversores experimentados tienen éxito porque saben cómo dejar de lado sus emociones. Una de las mejores cosas que puedes hacer es establecer un precio objetivo. Una vez que alcances ese objetivo, es el mejor momento para vender tus acciones sin sopesar nada más. De esa manera, obtendrás una ganancia sólida.

Si dejas que tus emociones se apoderen de ti, te expones al riesgo. Un día, el precio de las acciones podría estar subiendo y al día siguiente podría volverse en tu contra. Habrás perdido tu oportunidad de hacer ganancias. Un inversor experimentado te aconsejaría que elijas un rango, en lugar de un precio único, en busca de cierta flexibilidad. Un buen lugar para comenzar es esperar a que tus acciones dupliquen su precio.

Cuando los fundamentos empresariales fallan

Cuando poseas acciones de una empresa, querrás vigilar de cerca el desempeño comercial de esta. Así, serás uno de los primeros en saber si sus fundamentos empresariales comienzan a declinar. Algunas métricas clave para realizar un seguimiento incluyen el volumen de ventas, los márgenes de beneficio y el flujo de caja. Puedes mantenerte actualizado leyendo noticias comerciales, y los servicios de inversión también suelen brindar informes comerciales y análisis.

Además de las cifras financieras, también es oportuno que supervises las relaciones públicas generales de la empresa. Cualquier cosa que pueda dañar la reputación de la organización, como el fraude, puede ser una causa de que haga que tus acciones caigan en picado.

Cuando hay una mejor oportunidad

Si quieres ser un inversor exitoso, debes ser un oportunista. Investopedia define el coste de oportunidad como las ganancias que perderás cuando elijas una opción sobre otra. Comprar y vender acciones es un juego innato de medir el coste de oportunidad en todo momento. 

Antes incluso de comprar una acción, es conveniente dedicar tiempo a investigar y evaluar diferentes opciones para poder elegir la mejor. Eso no significa que tu selección vaya a tener el mejor desempeño en todo momento.

Tu stock inicial podría comenzar a tener un rendimiento inferior: no hay problema en saltar del barco y buscar otra mejor opción.

Después de la adquisición de una empresa por una prima elevada

Cuando una empresa anuncia una fusión o adquisición, es el momento de actuar con rapidez. Los precios de las acciones suelen subir cuando se compra una empresa por una prima elevada. Por tanto, es un buen momento para vender tus acciones y asegurar tus ganancias.

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